miércoles, 25 de abril de 2012

Nicolás del Hierro: El color de la tinta

Nicolás del Hierro: El color de la tinta

 

El poeta manchego Nicolás del Hierro ha reunido en una antología titulada El color de la tinta (Ediciones Vitruvio), la esencia de su obra poética y será presentada este próximo viernes 27 de abril a las 20,oo Horas en el Salón de Actos del Ateneo de Madrid. Calle Prado Nº 21. Junto al autor estarán, además de el editor, Pablo Méndez, el presentador del acto Miguel Losada y dos buenos poetas como Miguel Galanes y José Luis Morales que, como  conocedores de la obra de Nicolás, seguro estoy, darán cumplida cuenta de su poesía  que, en esta antología, cuenta con el prólogo de otro muy buen poeta y crítico literario: Pedro A. González Moreno.





El sábado se presentará esta antología en Piedrabuena (Ciudad Real), localidad natal de Nicolás del Hierro que en esta ocasión estará acompañado por el autor del prólogo.


Yo, en esta noche, ya casi madrugada, quiero escribir algo sobre este hombre, machadianamente bueno,  que ha publicado en una antología, El color de la tinta, la esencia de sus 50 años de escribir poesía.



Nicolás del Hierro (Piedrabuena, Ciudad Real, 1934.) Reside en Madrid desde los veinte años. Es poeta, además de escritor, conferenciante y crítico literario. Tiene publicados una docena de poemarios, entre ellos, Profecías de la Guerra (Bilbao,1962), Este caer de rotos pájaros (Madrid, 1979), Muchacha del Sur, Premio Puerta de Bisagra (Toledo, 1987), Cobijo de la memoria, Tertulia Literaria El Empotro. (Vadepeñas, 1995), Lectura de la niebla, accésit del Premio Alfonso VIII (Cuenca, 1999), Mariposas de asfalto (accésit del Premio Rafael Morales, Talavera de la Reina, 1999) y Dolor de ausencia (Guadalajara,2005)




Ha visto publicadas dos Antologías de sus versos: Toda la soledad es tuya en la Biblioteca de Autores Manchegos y Antología de la Poesía Cósmica de José Hierro y Nicolás del Hierro (México, 2004), y ha participado en numerosas antologías colectivas.


Es autor de varias novelas por lo que tiene en su haber el Premio de de La Crítica Castilla-La Mancha 2004 y también libros de relatos


Nicolás del Hierro nos dice que su poesía siempre ha sido algo trágica, escrita y fundamentada en las raíces, en su tierra, y en el pensamiento de lo perdido.

Se canta lo que se pierde decía don Antonio Machado y Nicolás cobija su memoria (Cobijo de la memoria fue, precisamente el primer libro que me envió dedicado Nicolás en 1995, luego vendrían más), en la temática Tierra, raíz, origen, infancia, en definitiva en un pasado a veces duro como el tiempo de guerra y postguerra que le toco vivir. En su manera de decir Nicolás hace hermoso todo lo que toca, ya desde la nostalgia, ya desde la crítica social, ya desde la reflexión o la poesía de pensamiento, nos ofrece siempre una poesía serena, suave , como de brisa (aunque a veces sea producto de tormentas) y es que Nicolás del Hierro es un poeta tranquilo, comedido, sencillo, con la humildad de los que dudan y la grandeza de los que dudan. Su poesía le nace siempre de dentro, de las entrañas, de la necesidad de contar y cantar a la raíz y al hombre.


Nicolás del Hierro está en posesión de muchos premios y distinciones, pero la distinción que más le gusta es la que elevó en acuerdo el pleno del Ayuntamiento de su pueblo natal (Piedrabuena) al crear, el 17 de abril de 1997, un Premio  con su nombre para galardonar un libro de versos.



Hasta la fecha, claro está, porque resulta que este año esta distinción, este Premio Nicolás del Hierro de Poesía (ya sería su decimoquinta edición creo), ha sido suspendido hasta que la CRISIS lo permita de nuevo. (O quien corresponda porque, ya se sabe, al perro flaco… y  yo me pregunto: ¿Por qué la Poesía y los Poetas parece que somos siempre ese pobre perro flaco?)


Yo lo siento mucho por Nicolás ya que un poeta como él no merece ésto. De modo que vuelvo a preguntarme:
a quien corresponda ¿ No es mejor reflexionar,  hacer cuentas y una vez hechas, ver de mantener el Premio de Poesía Nicolás del Hierro?  A lo mejor tiene  más cuenta que suspenderlo.


Y de paso este buen poeta que es Nicolás del Hierro, seguirá así, sintiéndose orgulloso de que su pueblo, Piedrabuena, le siga distinguiendo con el Premio de su nombre.


Él, que ha dejado, escrita en su poesía, como ha dicho: Mi poesía siempre ha sido escrita y fundamentada en las raíces, en mi tierra, lo merece.


Y no hay que olvidar que también ha escrito en colaboración eso sí, pero ha escrito, la Historia de Piedrabuena, pero claro aquí como un día escribió Nicolas: El hombre, aquí, con su problema, / con su carga de tierra en los tirantes… / Si lloviera…/ Si lloviera… / El agua, / el agua es lo que importa./ Una tormenta fuerte, grande, / que se llevara este sabor a polvo, / esta tribulación que sale, / sin merecerlo, a veces, por la boca.


Bien, os dejo el poema completo porque es tan bueno que merece leerse y releerse. Yo, como no puedo estar en la presentación y creo que este lo leerá, voy a hacerlo yo también en voz alta, fuerte, clara… a ver si llueve, como dice el poema, y sembramos lo que hay que sembrar.






Hasta la boca, hasta los mismos labios,


vertiéndose, derramándose,


como una nube…


¡Dios, cuánta amargura


se junta en ocasiones en el pecho!



Hay que dejarlo atrás:


soñar es sólo un lujo de los privilegiados.


Aquí no hay más que tierra,


tierra. Me sabe a tierra la saliva


y la nariz no aspira sino polvo.


El hombre, aquí, con su problema,


con su carga de tierra en los tirantes…


Si lloviera…


Si lloviera...


El agua,


el agua es lo que importa.


Una tormenta fuerte, grande,


que se llevara este sabor a polvo,


esta tribulación que sale,


sin merecerlo, a veces, por la boca.


El agua…


El agua…


El agua…


¡Si lloviera


podríamos sembrar algo de amor!


Nicolás del Hierro



2 comentarios:

fcaro dijo...

Gracias, Manolo, siempre atento a todo lo que importa. Nicolás no suele leer los blogs, ni siquiera el mío, pero se lo haré llegar. Un abrazo. Pacocaro.

Anónimo dijo...

Manuel: Hablas de un excelente poeta y de una gran persona. Un hombre querido y querible. Lo que es muy de agradecer. ¿Nos veremos luego? Un gran beso. Carmina