jueves, 29 de octubre de 2009

LUIS GARCÍA MONTERO: Mañana no será lo que Dios quiera








Acabo de releer este libro (Mañana no será lo que Dios quiera, Alfaguara, 2009) de Luis García Montero y, de nuevo, como me sucedió este verano en la sierra, al cerrarlo, he tenido la sensación de estar, invisible, sentado en la Kon-Tiki, escuchando cómo Ángel González le cuenta a Luis, entre güisqui y güisqui, la historia de su vida durante la niñez, la adolescencia y la entrada en esa juventud de la veintena donde, de momento, concluye este documento lírico a modo de prosa poética, que Luis García Montero ha escrito en memoria del amigo (y eso se nota en cada página), desde la más profunda admiración y el mayor de los afectos.

Una historia contada con amor, con ternura, con humor, con ironía en ocasiones y siempre desde el punto de vista más positivo que pueda existir para narrar hechos que, por su naturaleza, fueron terribles y por tanto susceptibles de ser contados desde... planteamientos o posturas de mayor dureza.

Pero no, Luis García Montero, tal y como Ángel González se lo fue contando, ha puesto en orden las cosas de su amigo, ha revisado la carpeta azul, esa donde se guardaba lo concerniente a la familia: anécdotas,documentos, recuerdos,fotografías, alegrías, tristezas, vida en definitiva, y las ha nombrado con palabras escritas y, al nombrarlas como se las nombró de viva voz durante un tiempo el poeta de Oviedo, de Páramo de Sil y de Primout, de Madrid, de Alburquerque, el de Nuevo México... les ha dado vida, y en esa vida encontramos el pulso, el latido, de un tiempo sucedido, ya lejano, vivo en la memoria que compasivamente acuna el ayer sin odio, sólo con la tristeza, en ocasiones, de lo incomprensible, o lo injusto, o lo doloroso de la situación, con humor muchas veces y con amor siempre. (Con el amor del machadiano hombre bueno que era Ángel Gonzalez)

Mientras escribo esta entrada que comencé ayer día 29 me entero que el Gremio de Libreros ha concedido el premio al mejor libro del año a Mañana no será lo que Dios quiera. El año pasado creo recordar que el Premio fue para El corazón helado de Almudena Grandes. Ambas obras, tan diferentes, tienen un nexo: el tiempo de un tiempo de guerra y de postguerra, tan sombrío, tan sin color, tan miserable, tan largo, de tanto y tan amargo silencio, que nunca debería de haberse producido.

Aquellos que no sepan del poeta Ángel González, descubrirán en el libro que Luis García Montero, con el ritmo y la música del canto más cercano, con las palabras precisas, ha bordado primorosamente el pañuelo de una realidad trastocada en belleza mientras nos muestra al niño, al joven, al hombre, y cómo no, al poeta y muchas de sus claves para conocerlo mejor con los poemas, no muchos pero esclarecedores, que en él incluye.

Y es que Luis García Montero (Granada 1957) que maneja el ensayo, la columna periodística, la poesía...lleva tras de sí mucho tiempo de dedicación a la palabra, al lenguaje. Es Licenciado en Filosofía y Letras por la Universidad de Granada con obtención del Doctorado en la misma ciudad. Es Catedrático de Literatura Española, es ensayista y es poeta. Su primer libro de poemas, creo recordar, obtuvo el Premio Federico García Lorca y lo tituló Ahora que eres dueño del puente de Brooklyn, 1980. Fue después Premio Adonais en 1982 por el poemario El jardin extranjero. Más tarde, en 1993, recibió el Premio Loewe y en 1994 el Nacional de Poesía por el libro Habitaciones separadas (Visor) Entre el primer libro y éste que le dio estos dos premios publicó, entre otros, Diario cómplice y Las flores del frío y una recopilación de poemas que tituló Además (Hiperión, 1994) por ser, según recuerdo que me contó, poemas que no había incluido en otros libros.

La poesía de Luis García Montero es de meditación y enmascarada con palabras cercanas, cotidianas. En ella nos ofrece, como trampantojo, un rostro de apariencia real que navega entre lo objetivo y lo subjetivo con un trasfondo filosófico,metafísico mientras va a la búsqueda, mediante la indagación, de lo personal y lo colectivo. Poesía de compromiso con la vida, con palabras y música asequibles (de ahí que sea leído y seguido por tantos jóvenes) que nos muestra un mundo donde lo lógico y lo irracional crean planos de convivencia poética, a veces, entremezclados.
Con su libro La intimidad de la serpiente (Tusquets) le concedieron en 2003 el Premio de la Crítica. Su último poemario publicado es Vista cansada (Visor, 2008)

Hay algunos momentos relacionados con Luis y Ángel que yo siempre recuerdo. Uno de ellos fue cuando, en febrero de 1998, invité a Ángel González a cerrar, en junio, un ciclo de Tertulis de Autor de Helicón. Vendría a leernos su poesía y yo le había prometido que sería un amigo común, el poeta Claudio Rodríguez, el encargado de hacer la presentación. Ángel estaba encantado pues le unía, ademas de sentir gran admiración por él, una buena amistad con Claudio. No pudo ser, lamentablemente Claudio Rodríguez tras decirme que sí, tuvo que afrontar una intervención quirúrgica a consecuencia de la enfermedad que, un año más tarde, nos dejó sin él. Fue entonces cuando, después de comentar con Ángel lo que sucedía con Claudio, llamé a Luis García Montero (esto de la "suplencia" no lo supo Luis, al menos por mí, no sé si Ángel se lo comentaría) y fue él quien, finalmente, ejerció de presentador de Ángel González que disfrutó con aquella tertulia.

En otra ocasión vino Luis, ya como Autor invitado, a leer sus poemas. Fue ese mismo año pero en octubre, para la apertura de un nuevo ciclo. Luis había publicado con Tusquets su poemario Completamente viernes y vino acompañado de Almudena Grandes. Recuerdo que Almudena acababa de publicar una nueva novela (tras haber publicado, anteriormente, Te llamaré viernes) titulada Atlas de geografía humana con los mismos editores.
Yo les había escrito un soneto titulado (no podia ser de otro modo) Viernes que "colgaré" aquí para finalizar la entrada.

Me pareció a mí que Luis disfrutó con aquella lectura en las Tertulias de Autor de Helicón. Igual que lo había hecho Ángel, con quien estuve, por última vez, en la Kon-Tiki, el lugar donde, como bien dice Luis García Montero, no podías invitar sino que eras invitado (y eso era un honor) por este gran poeta llamado Ángel González que me dejó tan buenos recuerdos que al leer y releer esta biografía lírica que le ha escrito su amigo Luis no he podido evitar sentarme, mentalmente,en la cafetería a escuchar cómo hablaban, los dos, del ayer del poeta ovetense. Un ayer que gracias a la natural tolerancia y comprensiva naturaleza de Ángel González y a la palabra precisa, hermosa, que ha empleado Luis García Montero, nos dejan un libro que sirve para disfrutar de la lectura y para mejor saber de este poeta que, como me decia Claudio Rodríguez, es grande porque maneja la palabra con amor y con celebración.

VIERNES

Para Almudena y Luis


Jamás un viernes fue más deseado
ni fue más importante en unas vidas
encontradas en viernes y sumidas
en tres días de amor tan recordado.

Un viernes que fue cima y fue collado
de sábado y domingo. Y despedidas
de lunes, con miradas afligidas,
en espera del viernes tan soñado.

Y carretera y manta... Andalucía.
Y tres días de espera interminable.
Y carretera y manta...de regreso.

Viernes de nuevo y caras de alegría.
Jamás un viernes fue más deseable
ni tuvo nunca un viernes tanto beso.

Manuel López Azorín
Del libro: Azul de los afectos

martes, 20 de octubre de 2009

Francisco Caro: Calygrafías





Francisco Caro (Piedrabuena,Ciudad Real, 1947) suele decirme que su modo de escribir poesía es una manera de expresión económica. De ahí la brevedad, la concisión, la sugerencia, los silencios... Él -me asegura- tiene dificultad, si el poema se alarga,para mantener vivo el discurso.

Eso es lo que suele decirme, pero yo no termino de creerlo. Su precisión de lenguaje,su aquilatamiento, la firmeza de construcción de su obra, no me parece producto de la economía sino de una manera de ser y de sentir, de una ética y una estética muy personal. Francisco Caro trata de establecer una simbiosis entre la llamada Poesía del conocimiento y la Poesía de la comunicación.

Y para ello Francisco Caro busca lo esencial y lo preciso y busca,me parece a mi, haciendo literatura de la vida, de su vida, tomar el pulso a la emoción, contenerla, enmascararla y, como el Fernando portugués de tantos heterónimos, fingir que siente ese dolor que tanto siente.

Y claro, le sale lo que le sale: juego y rigor, divertimento y reflexión, técnica y emoción, cerebro y corazón. Es el caso de este libro titulado, con truco, Calygrafías: la Cal que quema, que destruye, que aniquila,que reduce a ceniza, la Y (conjunción, como nexo) y las Grafías: (modo de escribir, de representar los sonidos) como la materia con que nos presenta la Poesía, la vida, el modo de pensar y sentir, en la palabra escrita.

Ay! la palabra escrita, esa, que tiene una música u otra dependiendo de cómo se coloquen las sílabas, los acentos... Como la vida que puede sonar con armonía o no en función de la exactitud o inexactitud de los pasos, las acciones, las palabras, los acentos...

Calygrafías, me parece a mi, es un libro de dos planos entrelazados entre sí: el plano literario con citas y quiebros a la Poesía y a los poetas, como apuntó Miguel Galanes, mientras nos habla de esa materia de escritura que no es sino el producto del conocimiento de este poeta que se ha forjado tras años de lecturas y de aprendizaje externo e interno y ese otro plano (más del fingimiento de Pessoa) de su propia vivencia:

1) vida, juventud, deseo, amor, pasión...
2) Vida, madurez, tierra, amor, origen, experiencia, tiempo... y finalmente,
3) vida,vejez, desencanto, descreimiento, abandono, aceptación de la cercanía de ese olvido de Bécquer y/o Cernuda y, en todas sus páginas, agujas de fonemas y el sueño intemporal, universal, sin patria ya, de la palabra.

Vida, en fin, que finge ser literatura,pero que se delata, emocionalmente, cuando nos llega, enmascarada, en un encuentro donde amó como un hombre: y era París / alba, desnuda, mía para siempre. Y en una casa: como arcano / cantero del temor, que se construye entre el deseo, el sueño eternal, y el amor terrenal. En una lectura de agosto con antifaz de poeta mujer: hay versos entre tinta y entre carne. En la imagen de un árbol: que espera cuanto ama. En los Infinitivos, en un Supe de desencanto y de descreimiento.

En un Toboso de patria, tierra, y otro tiempo de futura certeza. Y, finalmente, en la aseveración, nada enmascarada ahora, de un Fatum- Auschwitz como gas, como ceniza que no tiene más remedio que aceptar su destino, el del hombre: la nada entre las ruinas del invierno. Y mientras tanto, niega la inspiración frente a la necesidad de escribir, de salir fuera de sí,con o sin máscara,para mostrar, para buscar, para saber,para intentar comunicar que la barca ( aquella barca de las ferias cuando éramos niños) va y viene movida siempre por la fuerza del impulso vital.

En la presentación de este libro de Francisco Caro: Calygrafías, que ha sido Premio Internacional de Poesía Ateneo Jovellanos de Gijón en su XVII edición (libro que se presentó en Madrid, en la sede del Principado de Asturias, el día 30 de septiembre pasado) Miguel Galanes, encargado de su presentación, nos dijo que: Francisco Caro sabe de la Poesía Española y de su tradición. Por eso rinde homenaje a los poetas. No repite de la tradición hecha continuidad sino que,con rigor literario, usa tretas como esta: "Si escribo es para ver / cómo se balancea" (Y me vino a la Memoria "mi" Claudio Rodríguez y su Ballet de papel) Emplea irónicos procedimientos, establece vacíos como divertimento del silencio, sutilísimas sugerencias que tiene que llenar el lector. Claro, Francisco Caro suele confesar que la obviedad en el poema no termina de gustarle, de ahí ese toque oscuro, dice él, de misterio, de sugerencia, digo yo, que tienen algunos poemas suyos.

Francisco Caro sabe muy bien que escribir poesía es decir lo de siempre pero de manera que parezca nuevo y lo consigue con este Calygrafías que nos muestra temáticas de siempre: el deseo, el amor, la tierra, la muerte con -como diría Unamuno- pensamiento y sentimiento, es decir: cabeza y corazón unidos para escribir un libro que rebosa literatura no exenta de emoción o como dijo también en la presentación Miguel Galanes: la anécdota sí, pero por dentro y, por fuera, la literatura,el poema, ahí está el truco del conocimiento.

Calygrafías, leído con detenimiento, me ha parecido un pequeño gran libro de mucha calidad lírica, nada frío en su tecnicismo sino lo contrario, con enorme calidez emocional, eso sí, escondida entre la tramoya del buen espectáculo literario que supone este libro no facil pero sí,a pesar de que alguien ponga en tela de juicio con un verso de Quevedo ( Si no siempre entendidos siempre abiertos) el buen entendimiento de los lectores asturianos y que un amigo mío, de Gijón, desmiente. Me dice que leen y sienten y piensan como cualquier mortal sin peor o mejor entendimiento, al menos el mismo, y eso sí, siempre abiertos porque su entendimiento les permite disfrutar de muchas lecturas y de esta de Calygrafías sin dificultad, tanto en el plano literario como emocional.(Y me lo dice tras haber leído este libro que yo me encargué de regalarle al igual que Francisco Caro me lo regaló a mí)

Os dejo aquí, colgado, el poema que abre Calygrafías y, para todo el poemario,unas preguntas que mi amigo,el de Gijón. Él, que ha leido Calygrafías, y yo, hemos de hacerle (al menos yo pues mi amigo no lo conoce) a Francisco Caro en cuanto nos veamos. Son éstas:
¿Nos habla el sujeto poético del encuentro de amor con la amada metaforizada, ésta, en la Poesía?
o ¿Nos da cuenta del encuentro con la Poesía metaforizada en la joven amada?
¿No serán las preguntas anteriores, una refundición de ambas, la vida del hombre y el sueño del poeta?
Veremos que respuesta me ofrece y si coincide o no con la interpretación que mi amigo el asturiano y yo le hemos dado.
En cualquier caso yo les animo a leer este libro breve, por la extensión de sus poemas y sus páginas, pero intenso desde cualquiera de sus dos planos.

El encuentro
(5, Rue Eternidades)

Madrugaba Paris en aquel cuarto
vacío casi

apenas el espejo,
ella tan pura,
antiguo de un armario, e inocente

Lolita, blusa y jeans,
pequeña entre mis dedos encrespados
y los balcones tristes

se burló con piedad
de mi cintura lasa y del cabello débil

en el entarimado
dejó el foulard, última ropa y yo
le sonreía

qué haremos sino amarnos -me invitaba
su boca por combate- ahora, sin excusas

y la amé como un hombre

y era Paris
alba, desnuda, mía para siempre.

Francisco Caro
(Si alguno quiere conocer mejor a este manchego y poeta, a la izquierda, en Lista de blogs, podeis pinchar Mientra la luz que es el suyo.

viernes, 16 de octubre de 2009

FESTIVAL ACRÓBATAS 3ª Edición en L´Hospitalet (Barcelona) del 5 al 8 de noviembre




En octubre de 2008 se inició un sueño, tomó forma la idea de presentar al público a cantautores y poetas para alternar música y poesía, para fomentar y difundir esta última (y cito la poesía porque los cantautores aun siendo y actuando en círculos minoritarios son más conocidos y más seguidos por la gente joven)
Nombres, en calidad de poetas, como Luis Eduardo Aute, Felipe Benítez Reyes, Luis García Montero,Lara Moreno, Javier Canáves,Nares Montero, Sonia San Román, Eduardo Más y yo mismo hemos participado de y en este sueño.

La poesía, aunque pienso que, entre la juventud, tiene más interés del que nos parece, no es tan conocida, leída o seguida como lo pueda ser una canción. Esto es así, vaya! mal que no queramos verlo es así. Hoy, los cantautores son los nuevos "poetas" de los jóvenes o al menos se decantan, más que por los poetas, por los cantautores.
Cantautores como Pancho Varona, Carlos Chaouen, Paco Cifuentes, Andres Suarez,Patricio Bariandaran, Quique González entre otros,también han participado en anteriores ediciones

En esta tercera edición del Festival Acróbatas que se celebrará del 5 al 8 de noviembre en L´Hospitalet de Llobregat, participarán cantautores como Javier Álvarez que cantará poemas de Pablo Guerrero,Moncho Otero y Rafa Mora que además de rendir homenaje cantando algún poema de Mario Benedetti, cantarán otros poemas musicados, algo que llevan haciendo años para tratar de llevar la poesía a todos y -tengo que decirlo porque los conozco bien ya que hemos colaborado durante años- haciéndolo con mucha profesionalidad y sobre todo con rigor y con una especie de humor que engancha a la juventud a través, ahora, del espectáculo que pasean por toda España y que ellos llaman Bérbole.
Luis Ramiro, Marwan, Rafa Pons,tres emergentes cantautores de diferentes registro y con bastantes seguidores ya por su buena labor musical, estarán también en y L´Hospitalet así como Gastelo y Rebeca Jiménez.


El sueño que Vanesa y Rubén iniciaron en octubre del año pasado en Gavá (Barcelona) y luego prosiguieron en abril de este año en Madrid (Galileo Galilei) ahora vuelven a retomarlo en L´Hospitalet (Barcelona) Un hermoso sueño que, como dije al principio, va tomando forma, ganando adeptos y lo más importante, aun a pesar del esfuerzo por ponerlo en marcha, del arduo trabajo que supone ofertar una idea en la que muchos no terminan de creer, está dejando de ser un mero sueño y tiene visos de convertirse en una hermosa realidad y todo, gracias, no sólo a Vanesa y Rubén que son el alma de este Festival, sino a todos aquellos cantautores y poetas que apostaron y apuestan porque la poesía y la música que, como decían los griegos, son una sola unidad, pueda ofrecerse a todos y para todos sin excepción (al menos así lo pienso y así lo digo) después, el público eligirá lo que quiera, lo que le guste, hará suyo a éste o aquel poeta,es igual, lo importante es que pueda tener la opción de conocer y de elegir.

En cuanto a poetas, participarán en esta nueva edición Benjamín Prado y Aroa Moreno y habrá una lectura abierta de poemas de Mario Benedetti. Quizá no parezca mucha poesía; pero si contamos con que Moncho Otero, Rafa Mora y Javier Álvarez cantarán poemas musicados...

Estoy convencido de que, de vivir, Gabriel Celaya apostaría por el Festival acróbatas y seguro que también Angel González, Gloria Fuertes y José Hierro (a todos ellos los he conocido y tratado y sé que lo harían) como, seguramente, lo haría Blas de Otero. Y si retrocedemos un poco más también apostarián por Acróbatas Miguel Hernández, Federico García Lorca y Rafael Alberti y más lejos aún en el tiempo, Don Antonio Machado (y seguro estoy de que muchos poetas de de hoy se unirían a esta iniciativa, a este sueño, de concurrir las circunstancias adecuadas.)

Un sueño en fin, que puede ser que haga más lectores de poesía, tal vez, eso no lo sé, pero si sé que ofreciéndola de esta manera la conocerán más y mejor y eso ya me parece, de momento, muy importante.

Buena suerte a todos y buen Festival

miércoles, 14 de octubre de 2009

DIEGO MEDINA POVEDA: Urbana babel



Diego Medina Poveda (Málaga 1985) es un joven, estudiante de Filología Hispánica y le acaban de publicar su primer poemario Urbana babel en la Colección Monosabio que edita el Área de Cultura del Ayuntamiento de Málaga.
Urbana babel es un libro que se inicia con un poema dedicado a su padre (el poeta Diego Medina Martín) que, sin duda, será el primer referente de este joven poeta: el que a ser dios renuncia por dar vida / y a sus hijos rescata de la nada.

Un joven y emergente poeta que, en su primer libro, se muestra (y lo digo con toda sinceridad) como a mi me gusta y aclaro que no conozco a Diego Medina Poveda más que por unos minutos de charla en la Galileo Galilei cuando, con motivo de la inauguración en Madrid del Festival Acróbatas donde intervenían Rafa Mora y Moncho Otero junto a Luis Eduardo Aute, me lo presentó, a petición del joven, un poeta y amigo común: Julio Santiago.El muchacho me habló de su libro, en puertas de publicación, y me dijo que me lo enviaría. Así ha sido.

Me gusta porque llevo tiempo diciendo que el poeta que pretenda iniciar el camino-río de la Poesía, debe, primero que nada, beber de sus aguas, las de ayer y las de hoy y, tras conocerlas, respetarlas y aprender de ellas, incorporarse al cauce como un afluente más de ese camino-río de la Poesía, con su agua, la suya, heterodoxa o no, rebelde o no, pero sabiendo y bebiendo de lo que nos ha precedido al tiempo que buscando e indagando nuevos modos de contar y cantar todo lo que las aguas hayan dicho ya y todo lo que, por decir, pueda encontrarse en esa cuenca del camino-río,( que al fin y al cabo es la vía de conocimiento, y de comunicación, y de participación, y de comunion, y de compromiso, y de revelacion, y de salvacion) por donde tantos queremos caminar,de la Poesía.

Quiero recordar aquí lo que Claudio Rodríguez,hace ya mucho tiempo, me dijo una sola vez: camina, observa, interioriza y luego, escrbe. Después, cuando te preguntes ¿Qué es esto? aprende a podar, sin vanidad, podar hasta dejar lo escrito con la naturalidad del agua que ha dado vida a esas palabras, porque la Poesía es el agua, y la aventura y la comunión entre el yo más íntimo y la realidad. Y recuerda que, sabiendo de toda el agua que ha pasado y dejado su canto, sabiendo que casi todo está dicho, hay que buscar la forma de decir, de cantar, de tal manera que, aunque ya este dicha o cantada, parezca nueva. Ahí está la dificultad y ahí está el agua que es vida y da vida.

Urbana babel es el poemario de un joven caminante que piensa que la vida es un camino-río. Un camino río que, inexorablemente, habitará el olvido del hombre, aunque, a veces, se produce el milagro y el poeta continua en las aguas de ese río para ser bebido por los que vengan después.
En este libro he encontrado múltiples referencias, huellas, indicios de otras aguas y me ha parecido escuchar, con su lectura, el canto de siempre pero también nuevo: nada sabíamos y sin embargo / creíamos saberlo todo / pusimos rostro a esos fonemas / y fuimos dos dioses panaderos / elaborando al horno de los días / nuestra existencia de torre creada, / de urbana babel cerca del cielo.

Esta Urbana babel es una diversidad de tonos, lenguajes y formas. Un poemario que ensambla dos miradas, la del camino tradicional o clásico con la nueva de la búsqueda de otros tonos, otro lenguaje y otras formas. Es un libro con citas que le sirven a su autor para conformarlo y darle sentido, para beber y navegar, como si de un cauce se tratara, por las aguas de la Poesía, mientras canta a la vida y al olvido por todo el curso de sus páginas.

Me gusta lo leído de Diego Medina Poveda porque , me parece a mí, aprende y respeta la poesía que nos ha precedido y al mismo tiempo investiga, indaga y trata de buscar su propia agua, su voz, con toda la herencia del pasado y todas las posibles opciones que ofrezca el ahora y, posiblemnte, el mañana.

jueves, 1 de octubre de 2009

DIEGO JESÚS JIMÉNEZ:El poeta del verde de la infancia, pintor de la palabra justa.


Diego Jesús Jiménez, con un grupo de amigos y asistentes a su lectura en Alcobendas (1998-99) Yo,el segundo, de cuclillas, por la derecha.



Ayer supe de la muerte de Diego Jesús Jiménez. Me lo dijeron dos poetas amigos: Francisco Caro y Pedro A. González Moreno, y mi sorpresa, primero, y mi tristeza después me hicieron volver, desde Madrid hasta mi casa, recordando a este hombre bueno que quiso ser más pintor que poeta y que fue,(¿Fue? No me acostumbro al pretérito todavía) un grandísimo poeta, un gran pintor, un amigo de las libertades,un defensor de la justicia, una bellísima persona. Tengo que llamar a Társila para darle ánimo y decirle que lo siento mucho.

Y a ti ¿Qué te digo Diego Jesús? Siento no haberme enterado, no acompañarte en ese último adiós,como habrá hecho Francisca Aguirre,(Paca para nosotros) y seguro que también Manuel Rico, que tanto te quería y te admira, y Juan Carlos Mestre por ejemplo; pero ¿sabes? como aún estoy desconcertado por tu marcha (¡Coño que eras muy joven todavía!) Quiero leer un poema tuyo, ese titulado Noche de Navidad, sí, Diego Jesús, el que comienza diciendo: Te veo vivo... y, seguro estoy, que te veré pues vendrás, como tu padre en el poema, y hablaremos de pintura y me preguntaras por mi hija, como la última vez que nos vimos, y te diré que sí, que continúa pintando y le querrás comprar otro cuadro como aquel, ¿recuerdas? que te gustó tanto en aquella exposición que hizo en la Sala Martín Chirino en 1996y que yo personalmente, al acabar la exposición, te llevé a tu casa.

Hablaremos de poesía, de tu poesía, de tu obra, intensa y breve y magnifica, y recordarás cuando empezaste a publicar en el año 61 y luego , en el 64, cuando te dieron el Premio Adonais con La ciudad y después el 68 y tu Coro de ánimas, qué magnifico poemario, que te trajo el Premio Nacional de Poesía

Me volverás a decir que tú eres poeta del 68 (¡Ay el 68!) porque te gusta esa fecha y sus connotaciones y yo te recordaré que antes fuiste también del grupo o promoción de los SESENTA (Te acuerdas. años ochenta en Zamora, con María del Pilar Palomo a vuestro lado. Y me dirás: es verdad, porque los sesenta parecían no existir en poesía. Se pasó del 50 a los Novísimos y tampoco era así. Había poetas importantes que buscaban una renovación del lenguaje, una estética nueva y no hablo de poetas de los últimos 50, como nuestro amigo Félix Grande por ejemplo, sino de los primeros sesenta, poetas como Antonio Hernández, Jesús Hilario Tundidor,Rafael Soto Verger, que habiendo publicado en el 50 se unió a esta promoción, Benito de Lucas, Ángel García López y Miguel Fernández. Una promoción diversa, heterogénea, lo único que nos unía, además de amistad, era haber comenzado a publicar en una década que fue obviada por muchos, tanto es así que se nos llamó la generación puente. Puente entre los poetas del 50 y los Novísimos. Yo siempre preferí el 68.

¿Recuerdas Diego Jesús cuando Juan José Lanz te incluyó en un volumen antológico de la colección Austral, creo que fue en el 96 o 97 y os catalogó como poetas de la Generación del 68? Allí estabas tú y Antonio Hernández (el resto de la promoción o grupo anterior desapareció) y con vosotros, Antonio Carvajal, Antonio Colinas, Luis Alberto de Cuenca, Jaime Siles, Luis Antonio de Villena...(Cito a los que personalmente conozco) y Manuel Vázquez Montalbán,Guillermo Carnero, Leopoldo María Panero,Pere Gimferrer, Antonio Martinez Sarrión... (erais veintidós o veintitrés y no recuerdo a todos pero también era éste un conjunto de poetas diversos, heterogéneos, diferentes entre sí y que Juan José Lanz reune, a estos y no otros, por la circunstancia de haber comenzado a publicar en los años sesenta y otra razón importante: poetas nacidos a partir de 1939.)
Bueno -dices tú- yo me siento bien en ese apartado generacional, me gusta y voy junto a muy buenos poetas, diferentes, sí, como debe ser, cada poeta si es poeta debe ser, es, un universo único.
¡Ay Diego Jesús! Que tiempos aquellos verdad y se pretendía habitar un mundo sin puertas cerradas, sin palabras en silencio.

Recordaremos después las Tertulias de Autor de Helicón cuando viniste a dar una lectura y yo le pedí a Manuel Rico (Manolo para nosotros. Que buen estudio hizo de tu poesía, ¿Te acuerdas? Diego Jesús Jiménez: Capacidad visionaria y meditativa del lenguaje. Su obra,por la tuya, terminaba diciendo, brilla con luz propia. No hay más que acercarse a ella para comprobarlo) Le pedí, digo, que viniera a presentarte porque sabía que a ti te gustaría. ¿Cuando fue, en 1993 o fue entonces cuando me dedicaste tu obra Poesía, publicada en Anthropos? Sí hombre, sí, la que publicaste en el 90 con prólogo de Maria del Pilar Palomo y donde incluias tres poemas inéditos (Escribo poco, me dirás, me gusta más pintar) y uno de ellos era Color solo, sí, ese verde: El verde claro / que nos trae la alegría y la esperanza, no como el del musgo o el de las botellas / llenos de incertidumbre y de sollozos, y hablaremos del verde de tu infancia, y de tu adolescencia, del siempre azaroso presente, de la pérdida de las raices, de la naturaleza, de tu verso marcado por la memoria, lleno de realidad y de misterio, exigente, indagador, equilibrado, convulso,brillante... como la espuma del mar, como la luz del mar.

Como ese mar que nos hizo coincidir en Cambrils allá por 2003 para participar en unas Jornadas de Poesía contemporánea que organizaron el Departamento de Lengua y Literatura del IES Cambrils y el Departamento de Filologías Románicas de la Universidad Rovira i Virgili de Tarragona. Estaban coordinadas por el poeta y profesor Ramón García Mateos, ¿recuerdas? y se publicó, por este motivo, una antología, de todos los que participamos en ellas: recuerdo a Enrique Badosa,Joan Margarit,Felix Grande, Luis Felipe Comendador,Juan Carlos Mestre, Antonio Gamoneda, Mercedes Escolano,Ada Salas, José Corredor Matheos, Pedro A. González Moreno, Maximo Hernández, Juan López Carrillo, Jose María Micó,Tomás Sanchez Santiago, Javier Peñas,Antonio Carvajal, Angel L. Prieto de Paula,Jose Luis Morante,Jaime Siles, Carlos Vitale, Enrique Villagrasa, tú, yo...Fueron tantos que no recuerdo a todos (y sé que faltan) y fueron tres (o cuatro, no recuerdo ahora) intensos días, de amable dedicación y entrega por parte de Ramón García Mateos,y de escuchar la voz de los poetas frente al mar Mediterráneo que culminó con la publicación de la antología titulada, precisamente, Palabras frente al mar. Tu poema, El Lingüista comenzaba así:Es ambición hermosa someter las palabras / Reclamaba el linguista / la precisión del tiempo para nombrar las cosas.


Y, nombrando las cosa,tocaremos el color tan tuyo. ese verde / que se encoge de hombros / porque es inocente como la infancia, la tuya, la mía, la de tantos... Como Los artesanos, sobre la lejanía de la tarde, (que) formaban un horizonte de sonidos Y a la memoria llegará, de pronto,una dirección,un número, una casa: Calderón de la Barca, 41 y me dirás: era un lugar sagrado / para mi. Recuerdo / los cajones abiertos de la cómoda, su soledad / desordenada, mi infancia atravesando / con temor sus tinieblas
y seguirás pensando como cuando escribiste este poema, como cuando viviste este poema mucho antes de que tu memoria lo escribiera: Oia yo el silencio, entonces, de la casa;/ un silencio de olmo deshojándose." Como se deshoja el tiempo Diego Jesús.

Cuando me dedicaste tu libro Itinerario para náufragos, si hombre, en 1996, recien salido, aún no te habían dado tu segundo Premio Nacional de Poesía, eso fue al año siguiente, por este libro sí, que además del Premio Gil de Biedma, le llegó luego el Premio de la Crítica y ,éste, el Nacional de Poesia por segunda vez. Una obra no demasiado extensa pero muy intensa y muy premiada Diego Jesús.

Estoy mirando una hermosa publicación que consta de dos poemas tuyos: Poética y Catedral de León, va acompañada de unos estupendos dibujos de Juan Carlos Mestre. Es la Colección Calle del Agua y lleva el título de Interminable imagen: Y le llamas poema / al placer de la mente de obtener de las cosas / un lenguaje preciso que destruya / con el fermento de sus signos, las leyes / que edifica la muerte.
(...)
Entornar la mirada /hasta ver lo impensabe, es crear.

¿Te vas? Si aún no he leído entero Canto de Navidad. Leelo otro día y volveré- me dices- ahora, voy a dar una vuelta por la vida que fue. Voy a mirar el verde que está solo / y que es aventura,(...) porque no tiene rumbo, del que nacen los sueños / porque no nos olvida.

Escuha este poema manuel:


Seres
que amé, páginas
de un libro antiguo, huesos
oxidados, medallas, craneos difuntos que se deshacen
bajo la luz, voces
que se quejan, gritos
de desamparo. Veo sólo deshonra ante la muerte, miedo,


desconsuelo tal vez.
He aquí todo cuanto un hombre
puede tocar con su memoria, medir con el recuerdo
de su vida. Somos los restos Somos
de un amor, que la piedad diluye en el olvido.
el cazador de fieras
y la fiera encerrada, la esperanza del águila
y su jaula. Se oyen allí los rezos , los conjuros, las músicas
donde el hombre soñó. Mas no hay nada,
sabed, sólo el vacío habita
nuestra sangre. Sólo
el perdido disfraz de todo lo que amamos
nos habla.


Y mientras escucho el poema que abre el libro Coro de ánimas,el que tú me has dicho antes de dejarme solo. Recuerdo, también, Canto de Navidad, y Color solo y Calderón de la Barca,41 y del mismo modo que he sentido tu marcha, he sentido ahora tu presencia. Tu poesía me emociona, me hace evocar partes de mi memoria y, en ocasiones, me alumbra y me deslumbra con su luz.
Adios Diego Jesús,poeta, pintor, adios, hasta otro día, adios.