Hilario Barrero: Tiempo y deseo (Poesía 1971-2021)
Hilario
Barrero (Toledo, 1948), escritor poeta, crítico literario y traductor, ha
publicado un volumen Tiempo y deseo. 1971-2021 en el que recoge gran parte de su poesía desde 1971 hasta 2021.
Recibí, de la mano de José Manuel Suarez,
la cernudiana
antología Tiempo y deseo, publicada en Libros del aire. El libro (Cantabria, 2021), viene
bien acompañado por un prólogo de José Luis García Martín y un epílogo
de Carlos
Alcorta.
El tiempo sucedido, vivido, y el deseo, realizado o soñado, son los protagonistas de la poesía de este volumen, una selección de sus 50 años de poesía, unos 22o poemas como una obra completa magníficamente editada por Libros del aire.
Tiempo y deseo me ha parecido un volumen intimista y valiente en el que el autor nos habla del tiempo de la infancia, la juventud y la madurez camino ya de la vejez, de la vida y su atardecer. Encontramos en este libro poemas de lo cotidiano y poemas que son globales como son el tiempo de la plaga del sida y el del atentado de las torres gemelas que Hilario Barrero vivió ya que reside en Nueva York desde 1978 y todo ello acompañado de esa pequeña muerte cotidiana de los sueños y los días que es inherente al ser humano.
Barrero reflexiona con una poesía de realidad y de deseo, un canto
elegiaco doloroso y feliz, una meditación que camina entre la nostálgica elegía del tiempo sucedido y la
felicidad gozosa e hímnica de lo gozado,
ahora que el tiempo de la vida se vive al tiempo que se sueña y se desea, más con la materia
de los sueños que es la memoria. Hilario
escribe con la serenidad de quien canta
lo ya perdido, lo sucedido ya, mostrándonos la dureza de ese tiempo que va
sucediéndose y, también, de ese deseo que fue llama y ahora lucha contra
el tiempo.
PLAGA (fragmento)
“Todavía se aman a pesar de la plaga
y encuentran en la noche sus torsos alumbrados
sabiendo que la muerte les acecha celosa.
Tiemblan cuando desnudos se miran al cristal
y ven alguna mancha que oscurece su piel.
Con precaución celebran sus huesos arropados
y con certeza saben éste es tiempo de guerra.”
SEPTIEMBRE, 2002
Hay peligro de bombas
y oyen desde la alcoba las sirenas
que destrozan la luz en la ventana.
Temerosos salen después al parque
y sin rozarse se saben abrazados.
¿Dónde irá, se preguntan, el temblor de la luz
cuando llenos de sombra no vean la cometa,
no oigan las sirenas, no tiemblen al roce de una boca
y el parque les resulte impreciso y borroso?
El rumor de las hojas
extiende el miedo al atentado.
Crece cerca el aviso metal de la sirena.
La vida, la muerte y el amor son sus temáticas principales y en ellas podemos encontrar una profunda reflexión sobre ellas y una crítica áspera frente a la intolerancia, frente a la diferencia reprimida por una educación estricta y una moral coactiva, Así nos dice José Luis García Martín en su breve pero magnifico prólogo:
” Hilario Barrero ha sabido describir con tanta minuciosa sensualidad la aparición de los primeros deseos eróticos, su gozosa realización en la juventud, el ultraje de la vejez.”
Y más adelante nos dice José
Luis García Martín: “La gran
historia colándose en la pequeña historia de un hombre que es como todos los
hombres, que tuvo que luchar para hacer realidad su verdad, reprimida por los
ojos turbios de la inmoral moral tradicional, pero que además sabe encontrar
las palabras precisas para decir lo que todos hemos alguna vez sentido pero no
acertábamos a expresar: el lanzazo cruel de la fugaz belleza entrevista, las
noches de amor sin deseo y de deseo sin amor, la casi insoportable
intensidad de algunos instantes que
bastan para justificar una vida, el ultraje de los años, la gozosa variedad del
mundo.”
RAZÓN DE VIDA
La soledad, el miedo y el silencio
viven en esta casa respetada,
principal y feliz en otro tiempo.
Familia virtuosa en ejercicio
de ejemplares conductas, concibieron
cinco hermosos varones que vivieron
dentro de la moral más absoluta.
Nada queda de aquello; desolados
corredores y vacíos salones
con historias de prisas y de llantos,
tiempo sucio en lámparas cegadas
por el polvo de una lluvia mortaja,
un agrio olor a crisantemo barro
mal cocido en el jardín del sexo
y el dragón del deseo destruyendo
la clausura de plata del silencio.
Queda sólo la mancha de unos dedos
en el visillo, como una mariposa
disecada que al contacto del aire
se deshace, y en el vidrio el reflejo,
la huella de unos ojos que furtivos
miraban bellos cuerpos oferentes,
convidando al carpe diem de la vida.
Hubiera dado algo por ser fuerte
y marcharse con ellos a otras tierras
donde morir y no pasar el tiempo
en aquellas paredes que le ahogaban.
Una
poesía escrita con gran sinceridad, formal o
clásica, a la manera de Cernuda, con predominio del endecasílabo, el
heptasílabo y el alejandrino que nos ofrece lo mejor de su poesía en verso blanco
plena de ritmo y emoción que son los mejores y necesarios condimentos para
elaborar un buen poema.
Y buenos poemas contiene Tiempo y deseo, un
libro que como bien dice Carlos Alcorta en su epílogo: “ recoge cincuenta años
de de creación poética. Son muchos años
y, sin embargo, el lector, si no presta demasiada atención a las fechas
y se deja llevar tan solo por el tono y por el ritmo, percibirá una emoción y
una intensidad similares en cada uno de los poemas,”
SENTIDOS
Muchos
años después, aunque ciegos de gozo,
se
seguían mirando igual que el primer día.
El
tacto precintado, la lengua consumida
secándose
de ruido y el perfume de un cuerpo
recordando
cuando los dos veían.
¿Cuánto
tiempo les queda de tropezar en sombras del pasado? ¿Cuándo la luz que les libere del peso de
otros rostros?
Cada
día celebran la ceguera de la misma manera
que
celebran sus cuerpos que ahora están midiendo
con
su tierra mojada una brecha en la luz!
Así pues Hilario Barrero nos ofrece contenido de expresión y con intensa emoción, una selección de poemas en los que el tono parece unir el ayer y el ahora, aun con el tiempo sucedido y lo hace de manera meditativa, con la nostalgia elegiaca de cantar lo perdido al tiempo que nos canta el sentimiento amoroso con la evocación del ayer y tal vez el sueño celebratorio de un ahora en el que el héspero anuncia la huida de la luz.
Hilario Barrero, como he dicho, reside en Nueva York desde 1978, ciudad en la que
ha impartido clases como profesor en el Borough of Manhattan Community Collegel de
la City University of New York, una de las universidades de la ciudad.
Como
poeta obtuvo en 1999 el Premio Gaston Baquero con su libro In tempore belli, (Editorial Verbum).
Es colaborador de la revista Clarín y tiene en su haber también el Premio de literatura de la
Academia de Bellas Artes de Toledo. Recibió este Premio de literatura en
2015 “en reconocimiento a su obra
literaria, poética y de traducción”.
Hilario Barrero también edita una revista de poesía y dirigena editorial con el mismo nombre que puso en marcha en 2010 en Brooklyn (Nueva York )
“Aunque el título
es ‘Adiós, Toledo’, el último libro de Hilario Barrero no es una despedida; todo lo
contrario, es un volver a su ciudad una y una otra vez, pero desde la
distancia. Siempre regresa el poeta y traductor toledano a las calles de su
infancia, adolescencia y juventud, aunque desde su ventana no se divise
ahora la torre de Santo Tomé sino el ‘skyline’ de Nueva York.
Este libro es un pequeño museo de las entradas que con el
nombre primero de "Nuestro poeta en Nueva York " y más tarde de "Diario de un jubilado en Nueva York" publicó durante años el suplemento cultural de ABC
«Artes&Letras de Castilla-La Mancha».
Manuel López Azorín
3 comentarios:
Muchas gracias por esta reseña tan completa y generosa que me alegra mucho. Un saludo cordial.
Muchas gracias por esta reseña tan completa y generosa que me alegra mucho. Un saludo cordial.
Para Por hache o por B: El libro lo merece.
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